lunes, 18 de octubre de 2010

RECORDAR PARA VIVIR

Urania Cabral, el personaje de Mario Vargas Llosa, intriga desde la primera pagina de la novela; cuando no se sabe el porque de la vuelta a su tierra y, más intrigante aún, el porque del odio y resentemiento que sentía hacia su padre.
"¿Lo detestas? ¿Lo odias? ¿Todavía? "Ya no", dice en voz alta. No habría vuelto si el rencor siguiera crepitando, la herida sangrando, la decepción anonadándola, envenenándola,..."
El lector nunca podría imaginar la verdadera causa de ese sentimiento tan profundo que marcaba a Urania y que la lleva, de alguna manera, a martirizar a su padre inválido con su monólogo lleno de argumentos y preguntas sin respuestas.
"¿Hay algo que no fuiste, papá? Me he convertido en una experta en Trujillo. En lugar de jugar bridge, golf, montar a caballo o ir a la ópera, mi hobby ha sido enterarme de lo que pasó. Cuantas cosas podrías aclararme, tú que los viviste de bracito con tu querido Jefe, que tan mal pagó tu lealtad..."
Al pasar sus paginas surge también la intriga de lo que le pasó al Jefe con ese esqueletito, como el la nombraba. Y, al avanzar la lectura, se nota que lo que marcó a Urania para toda su vida también marco a Trujillo, y lo hizo en lo que a el más le dolía, en su hombría y su machismo.
"...Pero, le envenenó esta idea el recuerdo de la flaquita que ese hijo de puta consiguió metérsela en la cama. ¿Lo hizo a sabiendas de la humillación que pasaría? No tenía huevos para eso. Ella se lo habría contado y, él, reído a carcajadas... Tembló de vergüenza y rabia..."
Urania, una mujer, que a pesar de llevar en ella la marca de la dictadura y el dolor por la traición,logra superarse profesionalmente y, si vuelve a su país, lo hace por la necesidad de develar el oscuro secreto que nadie en su familia conoce. Lo hace, tal vez, para sentirse liberada de un gran peso que remuerde su conciencia. No se si lo logra, pero posiblemente esta confesión la ayuda a sentirse predispuesta para empezar una nueva vida.
"Urania trata de calmarla: "Si, si tía, lo que tu digas, no te agites, te lo ruego." Sus dos hijas rodean a la anciana,..
_Perdóname por haberte contado estas cosas- la besa Urania en la frente- fue un disparate. Pero me quemaba hacía tantos años."
La historia de Urania Cabral fue algo común en las dictaduras de Latinoamerica, al igual que el cruce de conspiraciones para acabar con ese personaje que tiene un poco de Dios y un poco de demonio, amado y odiado a la vez. Por el Jefe, el Padre de la Patria Nueva, algunos eran capaces de hacer cualquier cosa, como Agustín Cabral, que pagó muy caro lo que hizo.

jueves, 14 de octubre de 2010

HAIKUS

La vieja casa
como una melodía
llena de recuerdos.

Gran amor tuyo
nunca lo olvidarás
dejó sus huellas.

La luz del amor
ilumína las flores
del amanecer.

En mi gran vida
lo mejor fuiste tu
como olvidarlo.